En primer lugar soy mamá de dos infancias tan únicas como desafiantes. Y esa experiencia me transformó para siempre.
El amor, el caos, las preguntas, el cuerpo en carne viva y el corazón abierto me empujaron a repensarlo todo: la salud, el tiempo, la maternidad, el cuidado. Ahí nació una nueva forma de mirar y de acompañar.
Estudié Biología en la UBA y me recibí como Técnica Superior en Laboratorio de Análisis Clínicos en la Cruz Roja Argentina.
Realicé mis prácticas en el Hospital Rivadavia y trabajé más de diez años en el Laboratorio Central del Hospital Municipal Héctor Cura de Olavarría, y también en Bromatología.
Fui docente en la Escuela de Gobierno en Salud "Floreal Ferrara", donde enseñé a futuros técnicos.
Con el tiempo y la maternidad, mi vocación se expandió.
Me formé como puericultora en la Escuela Integral de Puericultura y Crianza (PYC) y luego me diplomé en la Universidad de la Rivera Plate. Y me seguí formando y especializando en áreas específicas, actualizándome no solo en la información, sino en la manera de comunicarlo.
Allí encontré otro modo de hacer salud: más cercano al cuerpo, a la emoción, al deseo y a la escucha.
Con herramientas concretas, formación profesional actualizada y una mirada humana que pone al cuerpo y al deseo en el centro.
Creando espacios íntimos, informados y respetuosos donde puedas sentirte libre de preguntar, emocionarte, elegir, soltar y encontrar tu forma de maternar.
Solo recomiendo lo que acompaña sin interferir, sin imponer, sin intervenir en lo sagrado del vínculo y del cuerpo.
Porque el sostén también se construye en lo cotidiano, en lo que tocamos, en lo que elegimos rodearnos.
@olalapueri integra todo lo que soy: ciencia, experiencia, escucha y amor, por que no.
Nos estamos viendo